Hace unos días un cliente y amigo me comento acerca del pensamiento lateral y sus posibles usos, si bien enteramente no lo practico para mi no era una novedad esta forma de buscar alternativas o soluciones a problemas de la vida cotidiana como a encrucijadas laborales y creativas, si me alento a seguir indagando al respecto.

Entre tanto material disperso en internet que hay sobre ésta forma de pensar y proceder se destacan autores como Edward De Bono, el cual escribió en 1967 «Lateral Thinking» y en 1985 la «Técnica de los Seis Sombreros pensantes».

Es sabido que pensar de una forma «lógica» nos lleva respuestas netamente «lógicas», pero al pensar «lateralmente» no necesarimente quiere decir que las respuestas que obtengamos sean «ilógias», si talvez diferentes. Lo que debemos resaltar de las respuestas o soluciones obtenidas desde el pensamiento lateral sean útiles a los efectos del problema o la situación y para lograr esa capacidad es cuestion de práctica, deshacerce de esa cronológico prodecimiento de ir en un sólo y único camino.

Ahora la gran pregunta El pensamiento lateral, ¿Que es?
Y me atrevo a decir que es la opción creativa de enfrentar situaciones y encontrar respuestas/soluciones alternativas a lo cotidiano. Ya que si procedemos siempre por la «lógica» indicada dificilmente obtengamos novedades en nuestras respuestas, si obtendremos soluciones, pero dichas soluciones ¿Son realmente creativas? lo pueden ser pero que tal si probamos por «otro lado» 😉 salgamos del cubo que nos contiene, aisla y margina de todo un mundo de opciones para enfrentar a un mismo problema.

Para ello internet nos brinda infinidad de recursos para obtener desafios ó problemas lógicos que nos pueden ayudar a ejercitarnos. Verán que soy uno de esos tantos que creen el cerebro es un músculo el cual se desarrollo si y solo si se lo ejercita, desafía y enfrenta a nuevas alterantivas o procedimientos.
Buscar problemas para aplicar el pensamiento lateral en Google

De todas formas siempre quedará abierta la posiblidad «lógica» si no logramos aplicar el pensamiento lateral o no podemos lograr esa costumbre creativa de evitar la lógica.